ÑERI (Juan Solá)

 

ÑERI (Juan Solá)

“Ñeri significa un hermano, una hermana, un amigo y una amiga, un lazo incorruptible por la fantasía del tiempo, la complicidad hecha carne y sobre todo, una lágrima partida al medio para enjuagar dos ojos que se miran. Todo en simultáneo.”

“Cuando no hay sol, los girasoles se miran entre ellos, buscando la luz que no encuentran”.

Ñeri es la historia de una amistad por encima de las adversidades, de ser familia más allá de la amistad, más allá de todos los lazos.

La historia es un relato crudo pero real, Juan Solá nos lleva a un Buenos Aires azotado por las crisis económicas, por el corralito y el no tener una moneda que valiera algo a pesar de todos los esfuerzos. Cuenta la historia de un buscarse la vida, de no tener nada y salir adelante, de un montón de hermanos que salen de casa prematuramente para ganar cuatro perras en cualquier sitio, con tal de que el hambre no les acose.

La narración se divide en tres partes, y éstas, de forma diversa: la primera en varios capítulos cortos; la segunda y la tercera se apoyan en cartas que se escriben los protagonistas.

Cada inicio de capítulo es un lamento por cuánta gente hay en una pequeña casa humilde y superpoblada. Poco a poco se va vaciando por los hijos que se van a buscarse la vida. Las cartas posteriores hablan de ese Buenos Aires de cambio de siglo, oscurecido por el corralito.

Ñeri no es sólo una denuncia del sistema social, sino de la "naturalidad" de la violencia intrafamiliar, violencia que sufren los hermanos que viven en la casa y que, junto con la miseria, son los resortes que les hacen huir de allí y buscarse un futuro. Los personajes están dibujados sin pelos en la lengua, con mucho que decir y nada que perder, porque nada tienen, a no ser que lo remedien ellos mismos: es una historia de lucha y supervivencia que merece mucho la pena.

Juan Solá es un escritor argentino, nacido en 1989. La crisis económica argentina la vivió desde pequeño, con lo que ha tenido que marcarle de una manera clara.